Las luces de las antorchas creaban una atmosfera ancestral,
arcaica, misteriosa.
Los invitados se sentían en el umbral de una región
encantada, donde un raro y antiguo suceso se manifestaría con seguridad.
Fue Charles, el anfitrión quien habló.
-Damas y caballeros, queremos presentarles a unos amigos que han venido de muy lejos para entregarnos un regalo muy especial.-
Dicho esto dos personas cubiertas con túnicas violetas
comenzaron a bajar por las escaleras. Una vez en el gran Salón se quedaron
inmóviles.
Los murmullos no se
hicieron esperar, tampoco algún escalofrío.
Charles volvió a hablar.
-Estamos conmovidos con Claire dada la trascendencia del
momento pues esta noche recibiremos el regalo más preciado para el hombre: la
Inmortalidad.-
Algunos sonrieron, otros no y unos pocos aplaudieron.
Fue entonces que los encapuchados descubrieron sus rostros; la
mujer rondaría los treinta años y el hombre quizás el doble de edad.
-Estimados: Adolf y
Eva.- dijo Charles.
-Es una broma de mal gusto.- dijeron varios mientras las
voces de protesta se alzaban.
-Cálmense y les explicaré; hace tiempo que nuestras vidas han
entrado en el ocaso por lo que decidimos
contactarnos con la Sociedad Secreta de Sacerdotes a la cual estos amigos
pertenecen, pues son descendientes directos del Primer vampiro, el primer
asesino de la historia: Caín.
Lo bueno es que vienen a tomar vuestras vidas y a cambio nosotros
recibiremos la Inmortalidad.-
-Buenas noches.- Y
continuó diciendo:
-Sirvientes; afuera están aguardando los demás invitados; que
pasen por favor y recuerden cerrar todas
las puertas, pues nadie puede escapar, ¿Vamos Claire?-
-Vamos Charles.-
Comenzaron a subir las escaleras para encontrarse con él,
estaban a minutos de lograr la eternidad.
Mientras, el pandemónium de gritos de horror y rugidos,
indicaban a las claras que el festín de los vampiros había comenzado.
F I
N
ESTA BUENO
ResponderBorrarMuchas gracias Juan.
BorrarBuen inicio de blog, amigo Richard.
ResponderBorrarAndare seguido por aquí.
Abrazo
Muchas gracias Fede.
ResponderBorrarAbrazo para vos.
Vaya, pues sí que es un cuento de terror, sí. ¡Y tanto! Me ha gustado :-)
ResponderBorrarHola Marsar, muchas gracias, me alegra mucho saber que te ha gustado.
BorrarBeso
Ah, ya me parecía que no era tu blog de siempre, Ricardo, jejeje, ¿es nuevo?. Pues buen estreno, una historia donde los vampiros se dieron vida a sus anchas, masacrando, para luego cosechar una horda de nuevos súbditos. Excelente relato, Ricardo, me gustó, te felicito. Un abrazo!
ResponderBorrarHola Alonso. Muchas gracias mi buen amigo.
BorrarMe alegra saber que te gustó.
Abrazo.
Richard ese lado oscuro se nota en tus letras, enhorabuena; caminamos por la misma ruta :))
ResponderBorrarHola Ale. Muchas gracias.
BorrarTodos tenemos nuestro lado oscuro donde se encuentran las historias extrañas, las pesadillas de terror, los pensamientos lúgubres.
En nuestro caso lo unico que hacemos es sacarlo de adentro y darle forma de cuento. Je. Para que no moleste. Je (bis)
Me alegra estemos en la misma ruta, aunque me inquieta un poco la soledad de la misma, la noche que se avecina y los ruidos extraños que se sienten. A vos no?
Je.
Beso.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
BorrarAUNQUE NO SOY MUY AMIGO DE LOS MISTERIOS ESTA ESTA MUY BUENA GRACIAS
ResponderBorrarMuchas gracias Juan, me alegra mucho saber que te gustó.
BorrarUn placer.